En su discurso, el Papa León XIV hizo un llamado a la paz y a la unidad, destacando la importancia de una Iglesia abierta a todos, especialmente a aquellos que sufren. Comenzó con un saludo en latín y luego continuó en varios idiomas, incluyendo español, para llegar a una audiencia global.

“Queridas hermanas y hermanos, este es el primer saludo de Cristo resucitado, el buen pastor que dio su vida por el rebaño de Dios. Yo también quisiera que este saludo de paz entrara en vuestros corazones y llegase a sus familias, a todas las personas en todas partes, a todos los pueblos, a toda la tierra. La paz sea con ustedes,” comenzó su discurso.
El Papa León XIV enfatizó la necesidad de construir puentes a través del diálogo y el encuentro, instando a la Iglesia a ser una comunidad misionera y sinodal. “Debemos buscar juntos ser una iglesia misionera, una iglesia que construye puentes y el diálogo siempre abierto a recibir a todos, a todos aquellos que necesitan nuestra caridad y nuestra presencia,” añadió.
León XIV también dedicó palabras de agradecimiento al Papa Francisco, destacando su humanidad y amor. “Gracias, Papa Francisco,” dijo emocionado, recordando la bendición del Papa argentino y su legado de reformas y progresismo.
Un Saludo Especial en Español
El nuevo Papa, que tiene una estrecha relación con Perú, también dirigió unas palabras en español a su querida diócesis de Chiclayo. “Y si me permiten también una palabra, un saludo… a todos aquellos, en modo particular, a mi querida diócesis de Chiclayo en el Perú,” proclamó desde el balcón.
Para concluir su discurso, el Papa León XIV rezó un Ave María, pidiendo a la Virgen por toda la Iglesia y por la paz en el mundo. Su mensaje fue recibido con gran entusiasmo y esperanza por los fieles congregados en la Plaza de San Pedro y por millones de católicos alrededor del mundo.