El expresidente del Comité Central del Partido Nacional (CCPN), David Chávez, lanzó duras críticas contra el candidato presidencial Nasry “Tito” Asfura, a quien responsabiliza directamente por el debilitamiento institucional del Consejo Nacional Electoral (CNE) y por lo que considera una entrega de poder al oficialismo.

“Ahora resulta que el principal responsable de esta crisis quiere darnos lecciones de democracia. Fue Tito Asfura quien negoció con Libre, se arrodilló en Casa Presidencial y entregó todo a cambio de su impunidad. Hoy el país paga las consecuencias. ¡El tiempo lo desenmascara!”, escribió Chávez en su cuenta de X.
Las declaraciones surgen en respuesta a un mensaje previo de Asfura, quien había advertido que la democracia hondureña está en peligro tras la renuncia de la consejera Ana Paola Hall.
Para Chávez, sin embargo, es precisamente Asfura quien allanó el camino para la actual crisis al pactar con el oficialismo en 2021, comprometiendo la independencia del CNE.
¿Ajuste de cuentas o advertencia legítima?
Las palabras de David Chávez no solo evidencian una fractura interna en el Partido Nacional, sino que también reabren viejas heridas sobre los acuerdos políticos que definieron la actual composición del CNE.
Según Chávez, Asfura habría sido el artífice de un pacto con el presidente del Congreso, Luis Redondo, que permitió la elección de consejeros suplentes afines a Libre, debilitando el equilibrio institucional del órgano electoral.
La disputa entre Chávez y Asfura refleja una lucha por el control del discurso y del liderazgo dentro del Partido Nacional. Mientras Asfura intenta proyectarse como garante de la democracia, Chávez lo acusa de haberla traicionado.
Esta división interna podría tener consecuencias electorales, debilitando la cohesión del partido en un momento clave.