El expresidente Juan Orlando Hernández (2014-2022) fue declarado culpable por narcotráfico por lo que pasará en prisión 45 años en una cárcel de mediana seguridad en Estados Unidos.

Hernández Alvarado fue encontrado culpable del delito de conspirar para importar cocaína a los Estados Unidos; de conspirar para usar y portar ametralladoras y dispositivos destructivos durante la conspiración de importación de cocaína, y de posesión de armas de fuego.
El expresidente ingresó a la sala de la Corte del Distrito Sur de NY, vestido con overol verde olivo, camiseta gris, con barba y pelo entrecana. Además, lucía cabizbajo.
Tras la sentencia aplicada por el juez Kevin Castel de 45 años de prisión, el abogado Disney Thompson expuso que JOH podría reducir su condena a 20 años por buena conducta.
Además, el juez estimó que Juan Orlando Hernández debe cumplir con las leyes de inmigración de Estados Unidos.
Frente a la resolución, el abogado Thompson manifestó que el exmandatario recibió una sentencia favorable, pues estará en una cárcel que no es de máxima seguridad.

Exposición del juez Kevin Castel
En su exposición, el juez Kevin Castel recordó que se sentenció a Hernández Alvarado por narcotráfico.
El fallo, ocurrido este miércoles 26 de junio, justo cuando se establece el Día Internacional de la Lucha contra el Uso Indebido y el Tráfico Ilícito de Drogas, una fecha establecida por la asamblea general de las Naciones Unidas desde el 7 de diciembre de 1987, para mostrar la determinación de combatir el consumo de drogas en pro del bienestar social.
Hernández, quien gobernó el país por dos periodos consecutivos y que se posicionó en la región como aliado incondicional de los Estados Unidos, fue investigado desde 2004 y justo al entregar la presidencia a su sucesora, la izquierdista Xiomara Castro, fue solicitado en extradición bajo los cargos de narcotráfico y delitos conexos por la justicia estadounidense.

Entre los testigos que desfilaron en el juicio contra JOH, por parte de la Fiscalía estadounidense, destacó el hijo del expresidente Porfirio Lobo (2010-2014), Fabio Lobo, un abogado, quien además de ser un narcotraficante confeso involucró a otros actores del poder político hondureño.
Igualmente, grandes capos de la droga que guardan prisión en los EEUU tras entregarse a la justicia de ese país o ser extraditados, confesaron sus vínculos y la podredumbre con que funciona la institucionalidad hondureña.
Nombres de otros políticos que aún no han sido procesados formalmente ni ligados en casos específicos con el narcotráfico fueron fluyendo en la medida que los barones de la droga exponían sus testimonios y fue así como, además de reafirmar sus relaciones de “negocios” con JOH, mencionaron a los expresidentes Porfirio Lobo y Manuel Zelaya Rosales (2006-2009), igualmente al secretario del Congreso Nacional Carlos Zelaya, entre otros políticos.
Acusaciones por las que fue sentenciado JOH:
- Conspiración para importar cocaína a los Estados Unidos.
- Uso y portación de ametralladoras y dispositivos destructivos durante la conspiración para importar cocaína, y posesión de ametralladoras y dispositivos destructivos para promover la conspiración de importación de cocaína.
- Conspiración para usar y portar ametralladoras y dispositivos destructivos durante la conspiración de importación de cocaína, y posesión de ametralladoras y dispositivos destructivos para promover la conspiración de importación de cocaína.