Estados Unidos suspendió este viernes de manera temporal la adjudicación de nuevos permisos humanitarios para los migrantes de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela, conocidos como “parole”, que permitían a las personas de estos países viajar y entrar de manera legal a EEUU.

El Departamento de Seguridad Nacional este viernes sobre la decisión de pausar el programa, que concede la entrada de hasta 30,000 personas de estos cuatro países a EEUU cada mes y les permite obtener un permiso de trabajo por un periodo de dos años.
El programa, que comenzó a finales de 2022 solo para ciudadanos venezolanos y luego se amplió para incluir a las otras tres nacionalidades ha permitido la entrada de casi medio millón de migrantes a EEUU, según datos del DHS.
La decisión de congelar el programa está relacionada con denuncias de fraude en las solicitudes, según reveló la cadena estadounidense Fox News este viernes.
Una portavoz DHS no confirmó esta información, pero explicó que la agencia resolvió «como medida de precaución» congelar la adjudicación de autorizaciones de viaje «mientras hace una revisión de las solicitudes de patrocinantes».

La agencia «reiniciará el procesamiento de solicitudes lo más rápidamente posible, con las garantías adecuadas», subrayó la portavoz en una declaración escrita.
Para pedir el permiso, los migrantes necesitan tener un patrocinante en EEUU que tenga ya un estatus legal y demuestre tener suficientes ingresos para apoyar financieramente al beneficiario del programa.
El programa, que ha sido blanco de críticas y acción legal por parte de la oposición conservadora, forma parte de las medidas del Gobierno de Joe Biden para frenar la migración en la frontera sur.