Los magistrados de la Corte Suprema de Justicia, Nelson Mairena y Mario Díaz, respondieron fuertemente a las acusaciones de corrupción que fueron denunciadas por el exgerente administrativo del Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS), Ramón Bertetty.

El funcionario acusó a ambos magistrados de cohecho, prevaricato judicial, lavado de activos y extorsión, en el marco de un supuesto caso de sobornos por un monto de seis millones de lempiras.
El magistrado Mairena afirmó que todas las acusaciones son falsas. “Las acusaciones en nuestra contra están basadas en falsedades. El que no la debe, no la teme.
“Esas acusaciones no van a prosperar. No hay absolutamente nada; es una falacia preñada de ignominia y no tenemos nada que manche nuestro ejercicio. Soy independiente, no tengo compromisos”, dijo Mairena
Por su parte, el magistrado Mario Díaz rechazó las imputaciones y subrayó “no me siento aludido. No he actuado al margen de la ley, estoy tranquilo y que se llegue a la verdad”.
Las acusaciones surgieron después de la visita del fiscal general, Joel Zelaya, a la Corte Suprema de Justicia, donde se reunió con altos funcionarios para discutir avances en los casos de corrupción. Durante su visita, Zelaya también anunció que el Ministerio Público investigaría las denuncias contra dos magistrados.

Presidenta de la CSJ se pronunció
La presidenta de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) de Honduras, Rebeca Ráquel Obando, rompió el silencio y escribió en su cuenta de X sobre las denuncias de casos de corrupción en ese poder del Estado.
“El Poder Judicial tiene una deuda histórica con la ciudadanía, quien reclama una verdadera justicia y un trato igualitario sin privilegios de ningún tipo, especialmente por estatus económico, político o social, entre otros”, expresó.
Reacciones sobre el impacto en la justicia
Nelson Castañeda, de la Asociación para una Sociedad más Justa (ASJ), expresó su preocupación sobre los señalamientos.
“Se requiere de un Poder Judicial altamente transparente. Estos señalamientos generan una percepción negativa de que la justicia no está funcionando correctamente, la investigación debe ser expedita y transparente, sin injerencia política”.
Por su parte, el abogado Ivis Discua Barillas opinó que estas situaciones no son nuevas, señalando que en todas las administraciones del Poder Judicial han ocurrido casos similares.
Sin embargo, remarcó que el problema radica en la forma en que se manejan estas situaciones.
“Un fiscal, molesto porque el Poder Judicial no resolvió conforme a su voluntad, amenaza y revela que dos magistrados están bajo investigación”, comentó.
¿Qué sigue ahora?
Con el Ministerio Público tomando cartas en el asunto, la transparencia y la rapidez de la investigación son clave para garantizar la confianza en la justicia.
Los magistrados mencionados insisten en su inocencia y solicitan que se llegue a la verdad para aclarar cualquier duda sobre su conducta.