El exasesor de campaña política del presidente, Donald Trump, Roger Stone, ha generado controversia al sugerir al presidente estadounidense que indulte al expresidente hondureño Juan Orlando Hernández, quien actualmente cumple una condena de 45 años en Estados Unidos.
Stone, hombre de confianza del mandatario de Estados Unidos, aseguró en su cuenta de X, que “El presidente Trump debería aprovechar la oportunidad para contraatacar a la corrupta presidenta hondureña de izquierda Xiomara Castro, quien se niega a recibir de regreso a los inmigrantes criminales”.
El político estadounidense acompaña la publicación con el término #FreeJOH, que rápidamente provocó furor en Honduras.
En un escrito de la página web http://americanmind.org dice en una parte de un artículo llamado Centroamérica Fuerte: “el Departamento de Justicia de Biden lo desprestigió con acusaciones endebles inventadas por los mismos narcotraficantes que Hernández extraditó a Estados Unidos para ser juzgados.
Cuando Hernández perdió el poder, Xiomara Castro lo extraditó a Estados Unidos, eliminando así a su principal oponente político.
El fiscal general de Biden, Merrick Garland, incluso admitió que lo hicieron para “ayudar” al gobierno izquierdista de Castro a consolidar el poder. Esto no es justicia; es sabotaje, puro y simple, y todo para allanar el camino para que un régimen liderado por Castro refuerce su control del poder en Honduras”.
Asimismo el artículo explica de que si en Honduras para el gobierno de Xiomara Castro es positivo porque teme recibir a sus inmigrantes. President Trump should seize the opportunity to hit back at corrupt leftist Honduran President Xiomara Castro who is refusing to take back criminal migrants. #FreeJOH https://t.co/afmJtgpXie
— Roger Stone (@RogerJStoneJr) January 25, 2025
Aquí el cuestionamiento que realizan a Castro: “La negativa de Castro a aceptar el regreso de los inmigrantes ilegales hondureños no hace más que reforzar esta estrategia, mostrando sus verdaderas prioridades: socavar la soberanía estadounidense y evitar rendir cuentas por los problemas de su país.
Si los inmigrantes ilegales hondureños son tan vitales para la economía estadounidense como afirma, ¿no debería Castro estar celebrando su regreso para que puedan contribuir a su nación en dificultades?”
