Al menos 386,000 hondureños se encuentran sin empleo y alrededor de 1.5 millones laboran en condiciones de informalidad, con ingresos inestables, sin acceso a seguridad social ni derechos laborales básicos, según alertó el Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep).

“386,000 personas no son solo los que buscan trabajo, también los que ya se rindieron porque sienten que nadie los contratará”, indicó el Cohep, la principal cúpula patronal.
El desempleo y la falta de oportunidades “castiga a la fuerza de trabajo actual, pero además a las generaciones futuras”, enfatizó el Cohep. La situación laboral en Honduras es crítica, y la falta de empleos formales afecta no solo a los trabajadores, sino también a sus familias y a la economía del país en general.
El Cohep ha instado al gobierno y al sector privado a trabajar juntos para crear más oportunidades de empleo formal y mejorar las condiciones laborales. La organización subraya la necesidad de políticas públicas que fomenten la inversión y el crecimiento económico, así como programas de capacitación y educación para preparar a la fuerza laboral para los desafíos del mercado actual.
La situación de desempleo y trabajo informal en Honduras es un problema complejo que requiere una solución integral y coordinada para garantizar un futuro más próspero y seguro para todos los hondureños.