La consejera del Consejo Nacional Electoral (CNE), Cossette López, denunció este domingo que sectores políticos están intentando coaccionar y presionar ilícitamente al organismo para que declare ganador a un candidato presidencial específico, pese a que el escrutinio aún no concluye y persisten miles de actas en revisión.
López afirmó que existe una clara intención de obligar al CNE a “romper la ley” y actuar de manera parcializada, algo que —según subrayó— no está dispuesta a permitir. “No señores, acá nadie está haciendo trampas ni favoreciendo o perjudicando a nadie. Ya es demasiado. El CNE no puede otorgar lo que el pueblo no otorgó en las urnas”, expresó con firmeza.
Denuncia presiones y un boicot en marcha
A través de su cuenta en la red social X, la consejera advirtió que se está intentando entorpecer deliberadamente el trabajo del CNE para provocar un boicot a la declaratoria oficial de resultados y abrir la puerta a “otros escenarios”.
“Quieren obligarnos a que rompamos la ley bajo coacciones ilícitas y presiones políticas, que nos apartemos de las normas y actuemos de forma parcializada y arbitraria. No lo haré”, afirmó.
Agregó que los consejeros deben continuar con su labor “nos guste o no el resultado”, recordando que el mandato del organismo es respetar la voluntad expresada en las urnas.
López señaló que el proceso ha sido “una guerra” desde el inicio y que el esfuerzo por adelantar etapas del escrutinio ha sido “socavado impunemente y de forma orquestada”, tanto desde instituciones como desde redes sociales. Denunció que mientras algunos actores atacan y difaman al CNE, quienes trabajan en el proceso enfrentan persecución política, amenazas y campañas de desprestigio.
Actas con inconsistencias y escrutinios especiales
El CNE inició el fin de semana el conteo especial de 2.773 actas con inconsistencias, como parte de la segunda fase del proceso electoral. En paralelo, distintas figuras políticas han denunciado irregularidades: Salvador Nasralla afirmó que existen 14 mil actas con supuestas anomalías.
Marlon Ochoa, por su parte, aseguró que son más de 17 mil las actas que presentan inconsistencias.
López insistió en que el órgano electoral debe agotar todas las etapas legales y reglamentarias, y que los escrutinios especiales continuarán conforme a los procedimientos establecidos.
Llamado a la responsabilidad y rechazo a la manipulación
La consejera advirtió que la desinformación y la manipulación buscan provocar agitación social, dañando el civismo con el que la población acudió a votar el pasado 30 de noviembre.
Cuestionó la incongruencia de quienes atacan el proceso solo cuando los resultados no les favorecen. “¿Y si el resultado cambia en las siguientes etapas y les favorece? ¿Qué harán con los destrozos que han hecho?”, planteó.
Asimismo, pidió reconocer las responsabilidades compartidas en las fallas del proceso y dejar de “dañar al país” con publicaciones falaces que buscan sembrar caos y pánico.
País en calma, pero con creciente frustración
A dos semanas de las elecciones, Honduras continúa sin un presidente oficialmente declarado. La contienda entre Nasry Asfura y Salvador Nasralla se mantiene cerrada, mientras el escrutinio avanza lentamente en medio de cuestionamientos y fallas técnicas.
Pese a los llamados del partido Libertad y Refundación (Libre) a movilizar a sus bases, el ambiente nacional se mantiene relativamente tranquilo. La población sigue con sus actividades cotidianas, mientras estudiantes celebran graduaciones y los líderes políticos esperan el avance del conteo especial.


