La consejera del Consejo Nacional Electoral (CNE), Cossette López, rechazó este jueves las acusaciones de fraude en las Elecciones Generales 2025, defendiendo la transparencia y legalidad del proceso.
López aseguró que todas las denuncias de fraude son infundadas, recordando que “algunos candidatos históricamente solo aceptan resultados cuando les favorecen”. Subrayó que ni ella ni la presidenta del CNE, Ana Paola Hall, tienen posibilidad de alterar actas o votos, aclarando que cualquier inconsistencia proviene directamente de las Juntas Receptoras de Votos (JRV) y no del Consejo.
La consejera reconoció fallas técnicas en el sistema de Transmisión de Resultados Electorales Preliminares (TREP), afectado desde su origen por una parálisis de más de un mes. Sin embargo, reafirmó que los datos son consistentes y verificables, y que las actas con inconsistencias serán revisadas bajo escrutinio especial.
López explicó que solo se revisarán las 2,773 actas con inconsistencias insuperables, correspondientes a aproximadamente 550,000 votantes según el sistema biométrico. Las otras 19,000 actas no podrán ser tocadas, garantizando el respeto a la ley.
El proceso de revisión se realizará bajo estrictos protocolos de seguridad, con cámaras de videovigilancia en cada mesa y transmisión 24/7, además de la presencia de observadores internacionales de la OEA y la Unión Europea, junto a representantes de la sociedad civil hondureña acreditada.
La consejera aclaró que el CNE no interviene en el conteo, el cual será realizado por una Junta Especial conformada por todos los partidos políticos, mientras el Consejo se limita a supervisar y garantizar el orden.
Finalmente, López afirmó que, si es necesario, hará la declaratoria “con papel y lápiz”, ya que el CNE cuenta con el 100% de las actas físicas, asegurando que la voluntad del pueblo hondureño se respete sin importar las fallas técnicas del sistema TREP.


