La embajadora de Estados Unidos en Honduras, Laura Dogu, llego a Casa Presidencial, el punto toral en agenda de la reunión sería la elección del Fiscal General y Adjunto, proceso lleno de polémica por la designación de Johel Zelaya, interinamente, a mano de nueve congresistas.
Hondumedios. Tras la designación de Zelaya por parte de Libre, la embajadora Dogu reaccionó en redes sociales y afirmó que la violencia generada en el proceso no ayuda al país.
“Estas acciones solo servirán para polarizar aún más y dañar la imagen del país y el clima de inversión, en un momento en que es urgente crear empleo. Las imágenes de más personas heridas son alarmantes y la violencia debe detenerse.
Los hondureños necesitan confiar en su democracia hoy más que nunca”, sostuvo Dogu.
EEUU vigilante
Los mensajes son claros de parte de altos funcionarios de Estados Unidos continúan a la orden del día, lo que demuestra que siguen de cerca lo ocurrido en el Congreso Nacional, con los disturbios y la elección de los fiscales interinos.
En esta oportunidad, el mensaje llegó desde el escritorio del asesor en materia de seguridad nacional de Estados Unidos, Phil Gordon, quien instó a los miembros del Congreso Nacional de Honduras a prestar atención a los hondureños.
“Instamos a los miembros del Congreso de Honduras a que atiendan la voluntad del pueblo hondureño y procedan a una selección justa y transparente del nuevo Fiscal General y Adjunto”.
El mensaje en la cuenta en X del alto funcionario puntualizó que: “Seguimos vigilando de cerca esta situación”.
El mensaje de Gordón se suma al que hizo la embajadora de EEUU en Honduras, Laura Dogu, quien mencionó que lo ocurrido en el Parlamento solo sirve para polarizar aún más y dañar la imagen del país y el clima de inversión, en un momento en que es urgente crear empleo.
También, el subsecretario para Asuntos del Hemisferio Occidental, Departamento de Estado de Estados Unidos, Brian A. Nichols, tachó que la decisión tomada por una minoría del Congreso de Honduras de elegir a un nuevo Fiscal General y Fiscal Adjunto socava aún más la confianza en las instituciones hondureñas.
