El jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas de Honduras (FFAA), general de división Roosevelt Leonel Hernández, ofreció declaraciones que han generado debate sobre el rol de la institución castrense en la vida política del país.
Hernández afirmó que las Fuerzas Armadas son “un instrumento de poder” al servicio del gobierno, el cual —según sus palabras— es quien determina los fines políticos que la institución debe ejecutar.
“Nosotros solamente somos instrumentos de apoyo para realizar y cumplir las políticas públicas de un gobierno”, expresó el jefe militar, subrayando que las FFAA son obedientes, no deliberan y no toman decisiones que le corresponden al poder político.
“Si es para beneficiar al pueblo hondureño o no, es el gobierno quien lo determina”, añadió.
Hernández también hizo una reflexión sobre la situación del país, utilizando una metáfora bíblica para advertir que Honduras está “destinada a desaparecer” si no se transforman dos pilares fundamentales: el modelo económico y el sistema educativo.
“No tenemos una guerra convencional, pero somos geopolíticos y geoestrategas, y por eso nos convertimos en asesores del sector político”, puntualizó.
Estas declaraciones se dan en un contexto en el que el papel de las Fuerzas Armadas ha sido objeto de escrutinio, especialmente por su participación en tareas de seguridad interna, apoyo a políticas públicas y su cercanía con el poder Ejecutivo.
Cabe recordar que el artículo 272 de la Constitución de la República establece que la misión principal de las Fuerzas Armadas es defender la integridad territorial y la soberanía nacional, mantener la paz y el imperio de la Constitución, así como garantizar el libre sufragio y la alternabilidad en el poder.
Además, la ley les permite colaborar con la Policía Nacional y otras instituciones del Estado en áreas como educación, salud, agricultura y medio ambiente.
Las palabras del general Hernández podrían reavivar el debate sobre la independencia institucional de las FFAA y su papel en una democracia que, según analistas, debe garantizar el equilibrio entre el poder civil y el militar.
