La oposición denunció que el oficialismo pretende instalar de nuevo una Comisión Permanente y legislar de facto en el Congreso Nacional y por eso se mantiene la parálisis legislativa.
Según los bloques opositores, esta maniobra representa un retroceso institucional y una amenaza directa al equilibrio de poderes, al pretender sustituir el pleno legislativo con una estructura reducida y controlada por el oficialismo.
La Comisión Permanente, que constitucionalmente tiene funciones limitadas durante los recesos legislativos, ha sido objeto de controversia en el pasado por su uso político.
“La intención de Libre es clara: gobernar sin consensos, sin debate y sin transparencia”, señalaron voceros de la oposición, quienes advierten que esta estrategia erosiona la legitimidad del Congreso y profundiza la crisis democrática.
La parálisis legislativa que atraviesa el Congreso no se resuelve con imposiciones, sino con diálogo, acuerdos y respeto a la institucionalidad. Si el oficialismo insiste en avanzar sin el respaldo del pleno, no solo profundiza la crisis política, sino que erosiona la confianza ciudadana en el sistema democrático.
Mientras tanto, el estancamiento legislativo continúa, afectando la aprobación de leyes clave y el funcionamiento institucional del país.
La ciudadanía observa con preocupación cómo el conflicto político se antepone a las necesidades urgentes de la población.
