El consejero del Consejo Nacional Electoral (CNE), Marlon Ochoa, denunció en las últimas horas que sus colegas Ana Paola Hall y Cossette López pretenden no incluir la totalidad de las actas con inconsistencias dentro del escrutinio especial del nivel presidencial.
La acusación profundiza la tensión interna en el órgano electoral en un momento clave del proceso de revisión de resultados.
Según Ochoa, la propuesta de las consejeras consiste en seleccionar únicamente 1,081 actas para el escrutinio especial, pese a que —según sus datos— existen 19,167 actas con algún tipo de inconsistencia en el nivel presidencial.
Más de 17 mil actas con anomalías, según Ochoa. El consejero detalló que dentro del universo de actas con problemas se encuentran: 14,073 actas con inconsistencias vinculadas al sistema biométrico, 1,882 actas adicionales con falta de firmas, errores de suma o que no han sido recibidas por el sistema.
Con base en estas cifras, Ochoa afirmó que el total de actas con inconsistencias asciende a 17,036, las cuales —según él— deben ser sometidas a un escrutinio especial voto por voto.
Exige conteo voto por voto y aplicación del reglamento
Ochoa sostuvo que el CNE está obligado a practicar un conteo especial de oficio en todas las actas presidenciales que presenten irregularidades, en cumplimiento del artículo 14 del Reglamento de Acciones Administrativas para Reclamos Electorales de los comicios generales 2025.
Dicho artículo establece los criterios bajo los cuales se pueden autorizar escrutinios especiales, especialmente cuando existan inconsistencias que puedan alterar la voluntad expresada en las urnas.
El consejero advirtió que limitar la revisión únicamente a 1,081 actas podría comprometer la transparencia del proceso y generar dudas sobre la legitimidad de los resultados finales.
Crisis interna en el CNE
La denuncia de Ochoa se suma a una serie de tensiones públicas entre los miembros del pleno del CNE, quienes han intercambiado acusaciones sobre la conducción del escrutinio y la selección de actas a revisar. Medios nacionales reportan que el señalamiento ha generado preocupación sobre la capacidad del organismo para conducir un proceso electoral ordenado y confiable.
Mientras tanto, el escrutinio especial aún no inicia formalmente, y el país continúa a la expectativa de avances en la revisión de actas con inconsistencias.


