El arzobispo de San Pedro Sula, Miguel Lenihan, hizo un llamado al gobierno de Honduras para que utilice el poder como una herramienta al servicio de la paz, la concordia y la convivencia pacífica.

Este mensaje fue emitido en el marco de la Semana Santa, un tiempo que el líder religioso describió como propicio para la reflexión y el fortalecimiento de los valores cristianos.
Lenihan destacó que el egoísmo, el odio y la injusticia son factores que rompen la comunión entre las personas, levantan barreras de división y generan violencia.
En su discurso, instó a los hondureños a evitar el libertinaje y los desórdenes durante este tiempo santo, enfatizando la importancia de vivir en armonía y respeto mutuo.
El arzobispo también subrayó la relevancia de la Semana Santa como un periodo en el que los cristianos conmemoran la Pasión, Muerte y Resurrección de Cristo.
Enfatizó que este es un momento para renovar el compromiso con los valores de amor, servicio y unidad, tanto en las familias como en la nación.
En su mensaje, Lenihan pidió a las autoridades que trabajen para eliminar las injusticias y abrir caminos de oportunidades para todos los ciudadanos. También hizo un llamado a combatir la corrupción y la pobreza, promoviendo un desarrollo equitativo que beneficie a toda la población.
El líder religioso concluyó su intervención con un mensaje de esperanza, invitando a los hondureños a ser signos vivos de amor y servicio, y a construir una sociedad basada en la paz y la justicia.