El Ministerio Público (MP) de Honduras, en colaboración con la Fiscalía Especial Contra el Crimen Organizado (FESCCO), la Dirección de Lucha Contra el Narcotráfico (DLCN) y la Policía Militar del Orden Público (PMOP), llevó a cabo seis allanamientos de morada e inspecciones en diferentes puntos del país.
Estas acciones están dirigidas contra una estructura criminal vinculada al tráfico de drogas y lavado de activos, en la que figuran nombres como Fredy Donaldo Mármol Vallejo y otros extraditables.
El caso se originó tras reportes de operaciones sospechosas relacionadas con José Ernesto Icaza Saborío y su núcleo familiar, quienes presentaban ingresos millonarios.
Investigaciones posteriores revelaron vínculos entre Icaza Saborío y socios del narcotraficante Rubén Alberto Mejía Mejía, alias “Yuquita”, quien a su vez mantenía nexos con los extraditables Fredy Mármol, Cristhian Jamil Suazo y Kensy Ibeth García Torres.
Durante las diligencias, se identificaron vehículos propiedad de Icaza Saborío utilizados en actividades ilícitas, algunos de ellos conducidos por Crescencio Ramírez Coria, un ciudadano mexicano señalado como líder de una organización criminal transnacional. Ramírez Coria fue extraditado desde Guatemala a Estados Unidos en años anteriores2.
Además, el MP retomó la recolección de indicios relacionados con posibles delitos de lavado de activos y tráfico de drogas, incluyendo documentación vinculada a Icaza Saborío como representante de la sociedad Inversiones Inmobiliarias del Atlántico (INATLAN S.A.), previamente identificada durante la Operación Laberinto en 20182.
Estas acciones forman parte de la estrategia del MP para debilitar las estructuras criminales dedicadas al narcotráfico y al lavado de activos, reafirmando su compromiso en la lucha contra el crimen organizado.
