El mundo de la literatura está de luto tras el fallecimiento del escritor peruano Mario Vargas Llosa, ganador del Premio Nobel de Literatura en 2010.
Vargas Llosa murió a los 89 años en su residencia en Lima, rodeado de su familia, según confirmaron sus hijos en un comunicado.
El autor de obras emblemáticas como La ciudad y los perros, Conversación en La Catedral y La fiesta del Chivo deja un legado inmenso en la literatura hispanoamericana y mundial.
Su carrera estuvo marcada por una profunda exploración de las estructuras del poder y la resistencia del individuo, lo que le valió múltiples reconocimientos a lo largo de su vida.
Vargas Llosa había regresado a vivir en Lima en 2022, tras décadas de residencia en Europa. En sus últimos años, retomó su relación con su esposa, Patricia Llosa, y disfrutó de paseos por la ciudad que inspiró muchas de sus obras.
La familia del escritor ha informado que no se realizará ninguna ceremonia pública y que sus restos serán incinerados, cumpliendo con su última voluntad.
Sus hijos han pedido respeto y privacidad en este momento de duelo, destacando que desean despedirse de él en un entorno íntimo, acompañados únicamente por familiares y amigos cercanos.
La partida de Vargas Llosa representa una gran pérdida para la literatura y la cultura mundial. Su obra, traducida a múltiples idiomas, seguirá inspirando a generaciones de lectores y escritores. Su legado permanecerá como un testimonio de su compromiso con la libertad, la democracia y la exploración de la condición humana.
