La Secretaría General de la Organización de los Estados Americanos (OEA) emitió un llamado urgente a las autoridades electorales de Honduras para que concluyan el escrutinio de votos lo antes posible, en estricto apego a la ley y con plenas garantías para todos los actores políticos y sociales.
A través de sus redes oficiales, la OEA subrayó que el proceso debe cumplir con la obligación constitucional de certificar las elecciones antes del 30 de diciembre, asegurando el pleno respeto a la voluntad del pueblo hondureño de elegir a su próximo presidente.
Exhortación a los actores políticos
El organismo hemisférico también instó a los partidos y candidatos a actuar con responsabilidad y respeto por la voluntad popular, garantizando la estabilidad y la paz en todo el país.
“Exhortamos urgentemente a las autoridades electorales de Honduras a que completen el recuento de votos lo antes posible, con estricto apego a la ley y con plenas garantías para todos los actores políticos y sociales”, señaló la OEA en su comunicado.
Estado del escrutinio
Según datos oficiales, de las 2,792 actas con inconsistencias se han logrado escrutar 1,331 actas, quedando pendientes 1,461 actas por revisar.
El escrutinio, con un avance del 99.92% de las actas, mantiene una ventaja para el candidato del Partido Nacional, Nasry Asfura, quien suma 1,396,464 votos (40.33%). En segundo lugar se ubica el candidato del Partido Liberal, Salvador Nasralla, con 1,366,277 votos (39.45%).
Contexto de tensión
El llamado de la OEA se produce en un ambiente político marcado por denuncias de presiones institucionales, cuestionamientos sobre la independencia del Consejo Nacional Electoral (CNE) y la urgencia de concluir el proceso en los plazos establecidos. La comunidad internacional ha reiterado su interés en que Honduras garantice un proceso oportuno, transparente y creíble, que fortalezca la confianza ciudadana y evite mayores tensiones sociales.
La OEA concluyó su exhortación recordando que la estabilidad democrática depende del respeto a la voluntad popular y del cumplimiento estricto de la normativa electoral: “El pueblo hondureño merece un proceso oportuno, transparente y creíble. La responsabilidad de garantizarlo recae en las autoridades electorales y en todos los actores políticos”.


