A ciegas nuevamente la “Operación Candado” ordenada por el Gobierno y que se ejecuta a nivel nacional para recuperar la seguridad del país.
Como ya es costumbre, las cámaras del Sistema Nacional de Emergencias 911, están apagadas lo que limita el accionar de los entes policiales y de investigación.
El gerente de la Empresa Hondureña de Telecomunicaciones (Hondutel) y vocero del 9-1-1 José Antonio Morales admitió que las cámaras de vigilancia están apagadas, debido a una “actualización en el software”.
Las cámaras que estuvieron sin servicio por más de un año y que recientemente se activaron unas pocas, de nuevo están inhabilitadas, mientras en el país campea la delincuencia.
El criminólogo Gonzalo Sánchez dijo que las cámaras constituyen el 30% de las evidencias que se utilizan para resolver un delito y que al estar inoperativas la población se vuelve más vulnerable a las operaciones de las estructuras criminales.
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