La diputada del Partido Liberal de Honduras (PLH), Maribel Espinoza, lanzó una contundente advertencia ante lo que califica como intentos deliberados de obstrucción al trabajo del Consejo Nacional Electoral (CNE).

Según la legisladora, cualquier interferencia con el cronograma electoral representa no solo una falta administrativa, sino un delito penal que socava el Estado de Derecho.
En sus declaraciones, Espinoza señaló directamente a los representantes del partido Libre, aludiendo a su ausencia en sesiones clave del CNE como una acción que pone en riesgo el orden democrático.
“Quien impida o retrase la celebración de sus sesiones incurre en responsabilidad penal”, afirmó, aludiendo al marco legal vigente que respalda la institucionalidad electoral.
Más allá del señalamiento puntual, lo que resalta es la crítica frontal al clima político que se viene gestando en torno al proceso electoral.
Espinoza acusa a ciertos actores de querer imponer sus voluntades “con caprichos o trampas”, replicando prácticas autoritarias que, según ella, recuerdan los errores del pasado.
La frase “los politiqueros de turno que se creen dueños de Honduras” expresa un hartazgo hacia quienes utilizan las instituciones como herramientas personales y no como pilares de una democracia funcional.
Su declaración es un llamado urgente a proteger la democracia hondureña.